En verano hace demasiado calor para cocinar algo elaborado, así que tiene que ser rápido y lo mejor de todo es que también sea comestible frío. Tenemos para ti una receta súper sencilla, deliciosa y baja en FODMAP. Es sin gluten, vegana y absolutamente infalible. Además, puedes ajustar los ingredientes a tu gusto y tolerancia.
Pero una vez más para los que no lo sepan: ¿Por qué bajo en FODMAP?
Los FODMAP son hidratos de carbono de cadena corta y alcoholes de azúcar que están presentes de forma natural en muchos alimentos. En principio, los FODMAP no son perjudiciales, sino que forman parte de la dieta diaria de las personas preocupadas por su salud. Sin embargo, las personas con intestinos sensibles, sobre todo las que padecen el síndrome del intestino irritable, pueden notar ciertos efectos secundarios, como diarrea, dolor abdominal e hinchazón.
Más información: Tan exitosa es la dieta baja en FODMAP para el síndrome del intestino irritable
Volver a la receta: Pasta de verduras de verano sin gluten
Lo mejor es que utilices tus verduras favoritas de temporada bajas en FODMAP; nosotros hemos elegido berenjenas, calabacines, pimientos y tomates. Después puedes mezclar los jugos de las verduras con un poco de agua de la pasta para crear una deliciosa salsa. Todo se cubre con albahaca fresca y opcionalmente (versión no vegana) con trocitos de mozzarella y parmesano. Lo bueno de esta receta es que también puedes dejarla enfriar y disfrutarla como una ensalada de pasta.
Ingredientes (para 5 raciones)
- 1 berenjena
- 2 calabacines medianos
- 2 calabacines medianos
- 2 pimientos
- 2 pimientos
- Aceite de oliva
- Aceite de oliva
- Tomates
- 250 g de tomates, preferiblemente de diferentes tamaños y colores <400 g de pasta sin gluten
- Pequeño manojo de albahaca
- Opcional: mozzarella.
- Opcional: mozzarella o aderezo al gusto .
Y así se hace - instrucciones
Precalienta el horno a 220°C calor arriba abajo. Corta la berenjena, el calabacín y el pimiento en trozos pequeños y colócalos en una fuente apta para el horno. Rocía las verduras con un poco de aceite de oliva y sazona al gusto. A nosotros nos gusta mucho con romero. Mete las verduras en el horno durante 20 minutos. Mientras tanto, corta los tomates por la mitad y añádelos al resto de las verduras, removiéndolo todo bien. Ahora deja que se ase todo durante otros 20 minutos hasta que todo esté bien blandito.
Mientras tanto, pon a hervir una cacerola con agua y añade una pizca de sal. Cuece la pasta siguiendo las instrucciones del paquete. Asegúrate de conservar parte del agua de cocción al escurrirla. Vuelve a poner la pasta escurrida en la cazuela.Elige las verduras según el sabor y la temporada.
Añade las verduras del horno a la pasta y añade un poco del agua de cocción sobrante, según la consistencia deseada. Asegúrate de añadir todo el líquido de las verduras. Pruébalo todo y sazona al gusto.
Ya estás listo para servir: Coge tus cuencos favoritos y colócalo todo muy bien. Puedes cubrir la pasta de verduras de verano con albahaca fresca o mozzarella, según te guste. Un pequeño consejo: también puedes dejarlo enfriar todo por separado y utilizarlo como un delicioso plato de picnic, por ejemplo.
Por cierto: cuando cocinamos fibras vegetales que contienen almidón (como patatas, legumbres, arroz, pasta, etc.) y las dejamos enfriar de nuevo, se produce el llamado almidón resistente. Este almidón no puede ser descompuesto por las enzimas del intestino delgado, por lo que llega al intestino grueso, donde es alimento para las bacterias intestinales; nuestras "bacterias adelgazantes", las Bacteroidetes, están especialmente contentas con este alimento. (1,2)
La pasta es un excelente plato frío
.Referenzen
- Vital M et al. Metagenomic Insights into the Degradation of Resistant Starch by Human Gut Microbiota. Appl Environ Microbiol. 84(23) (2018).
- Maier TV, et al. Impact of Dietary Resistant Starch on the Human Gut Microbiome, Metaproteome, and Metabolome. American Soc. Microbiology mBio 8:e01343-17 (2017).