Schlafstörungen: Liegt die Ursache im Darm? - myBioma

Trastornos del sueño: ¿La causa está en el intestino?

Tu intestino puede determinar la calidad de tu sueño

Pasamos alrededor de un tercio de nuestra vida durmiendo. Dormir es vital: es tan importante para nuestro cuerpo como comer, beber y respirar. Dormir lo suficiente es esencial para mantener una buena salud mental y física. El sueño y la relajación son la forma que tiene el cuerpo de recargarse y revitalizarse. Probablemente todos conocemos la sensación cuando no hemos dormido lo suficiente, estamos cansados, perezosos y de alguna manera no estamos plenamente presentes. El microbioma intestinal -el conjunto de billones de microorganismos que viven en tu intestino- no sólo tiene un enorme impacto en tu salud general, sino que también puede determinar lo bien que duermes. Echemos un vistazo más de cerca a la conexión entre el microbioma intestinal y el sueño, así como a las investigaciones actuales.

El microbioma intestinal influye en el ciclo sueño-vigilia

El ecosistema microbiano puede influir en el sueño y en las funciones fisiológicas relacionadas con el sueño de varias maneras, entre ellas alterando el ciclo sueño-vigilia del organismo e influyendo en las hormonas que regulan el sueño y la vigilia. A su vez, la calidad de nuestro sueño puede afectar a la salud y diversidad de nuestro microbioma. (1)
Existe una interacción constante entre el intestino y el cerebro, lo que significa que una alteración en cualquiera de ellos puede afectar al sueño.

¿Pero los trastornos del sueño también pueden proceder del intestino? La respuesta es sí. De hecho, el microbioma favorece la liberación de muchos de los neurotransmisores -como la dopamina, la serotonina y el GABA- que ayudan a regular el estado de ánimo y favorecen el sueño. Los estudios muestran una fuerte relación entre el desequilibrio del microbioma y el estrés, la ansiedad y la depresión, que a su vez pueden desencadenar o exacerbar los trastornos del sueño. (2, 3)
Las investigaciones también relacionan la salud intestinal con la percepción del dolor. Un microbioma poco saludable parece aumentar la sensibilidad al dolor visceral, lo que puede dificultar mucho más conciliar el sueño y permanecer dormido. (4)

¿Qué importancia tiene el sueño para el intestino?

Al igual que la disbiosis (desequilibrio de las bacterias intestinales) puede afectar al sueño, unos patrones de sueño poco saludables pueden alterar el microbioma intestinal. Éste es el caso, por ejemplo, del trastorno común del sueño, la apnea obstructiva del sueño. Esto provoca una respiración superficial e interrupciones de la respiración durante el sueño. Las personas con apnea obstructiva del sueño también roncan con mucha frecuencia. En un estudio, los científicos sometieron a ratones a un patrón de respiración alterada que imitaba los efectos de la apnea obstructiva del sueño. Descubrieron que los ratones, que convivieron con periodos de respiración similar a la de la apnea obstructiva del sueño durante seis semanas, mostraron cambios significativos en la diversidad y composición de su microbioma. (5)

Además, la duración insuficiente del sueño puede promover respuestas inflamatorias en el organismo y aumentar los marcadores inflamatorios en el intestino, así como incrementar la liberación de hormonas del estrés en el organismo. Todo ello puede repercutir negativamente en tu salud intestinal. (6)

¿Pero cómo funciona el intestino durante el sueño? El intestino también necesita periodos de descanso para funcionar de forma óptima. Durante el sueño, especialmente en las fases de sueño profundo, el movimiento intestinal se reduce, ya que el cuerpo se centra en los procesos de regeneración. Entre otras cosas, esto conduce a una recuperación de las células intestinales, se favorece la reparación celular y, en consecuencia, el intestino se fortalece. (7), (8)

El microbioma intestinal influye en las hormonas responsables del sueño

La salud intestinal también está significativamente relacionada con las hormonas que influyen en el sueño. La melatonina, la "hormona de la oscuridad", es esencial para el sueño y para un ciclo sano de sueño-vigilia. La melatonina se produce tanto en el intestino como en el cerebro, y existen pruebas de que la melatonina del intestino puede funcionar con un ritmo cíclico diferente al de la melatonina producida en el cerebro por la glándula pineal. (9)

Además, el cortisol es crucial para el ciclo sueño-vigilia. (10) Esta hormona es fundamental para la respuesta inflamatoria y al estrés del organismo y afecta a la permeabilidad intestinal y a la diversidad microbiana. El aumento de los niveles de cortisol a primera hora del día ayuda a promover el estado de alerta, la concentración y la energía. Es muy probable que los cambios de cortisol que se producen en el eje intestino-cerebro repercutan en el sueño. (11)

En pocas palabras, nuestro intestino afecta a lo bien que dormimos, y el sueño afecta a la salud de nuestro intestino. Si trabajamos ambos aspectos, podemos mejorar enormemente la calidad de nuestro sueño. Con myBioma, puedes averiguar fácilmente si tu microbioma intestinal está equilibrado y optimizar tu salud intestinal con las recomendaciones nutricionales adecuadas.

Una mirada más profunda a la ciencia del microbioma y el sueño

Un número creciente de investigaciones sugiere ahora que el vasto y diverso ecosistema microbiano del intestino tiene sus propios ritmos circadianos. Estos ritmos microbianos parecen estar profundamente entrelazados con los ritmos circadianos. (12)
Un ritmo circadiano, por ejemplo, se refiere a las fluctuaciones de las funciones corporales que están controladas por influencias exógenas (cambios día-noche) o endógenas (hormonas). Algunos ejemplos son las fluctuaciones de la frecuencia cardiaca, el ciclo sueño-vigilia, la tensión arterial y la temperatura corporal.
Las investigaciones sugieren que tanto el ritmo circadiano como el microbiano son capaces de influir en el otro y alterarlo, con consecuencias tanto para la salud como para el sueño. (13)

La dieta influye en el microbioma intestinal

Las investigaciones demuestran que los ritmos de bacterias intestinales están influidos por lo que comemos y cuándo lo hacemos. Un estudio realizado en ratones descubrió que cuando éstos seguían una dieta sana, producían más bacterias beneficiosas y que la actividad colectiva de la vida microbiana en el intestino seguía un ritmo diario -o diurno-. (14, 15)
Este ritmo, a su vez, apoyaba los ritmos circadianos del animal. Por el contrario, los ratones alimentados con una dieta "occidental" rica en grasas producían una vida microbiana menos óptima. Las bacterias de estos ratones no seguían ellas mismas un ritmo diario y además enviaban señales que alteraban el ritmo circadiano. Estos ratones ganaron peso y se volvieron obesos, mientras que los ratones que seguían una dieta sana no lo hicieron.

Una dieta sana que incluya muchos alimentos de origen vegetal favorece una flora intestinal sana
Una dieta sana favorece las bacterias intestinales buenas.

Los científicos criaron un tercer grupo de ratones sin microbioma. Como carecían de microbioma intestinal, no había bacterias que pudieran enviar señales al resto del cuerpo. En estos ratones se produjo una alteración circadiana, pero no ganaron peso ni sufrieron trastornos metabólicos, ni siquiera cuando se les alimentó con una dieta rica en grasas. Esto sugiere algunas conclusiones importantes. En primer lugar, que la actividad microbiana es clave para la función circadiana normal y, por tanto, para el sueño. En segundo lugar, que el microbioma, junto con la dieta, desempeña un papel clave en la regulación del peso y el metabolismo.

Estudios sobre el sueño y el microbioma en humanos

La investigación en humanos ha arrojado resultados similares. El microbioma humano parece seguir ritmos diarios influidos por el momento de comer y el tipo de alimentos consumidos, y parece ejercer efectos sobre los ritmos circadianos. La investigación también ha descubierto que la relación entre estos diferentes ritmos biológicos funciona en ambos sentidos. Los científicos han descubierto que las alteraciones de los ritmos circadianos -como las que se producen debido al desfase horario, ya sea por un viaje real o por el desfase horario "social"- alteran los ritmos microbianos y la salud del ecosistema microbiano. (16) Según las investigaciones, las personas que experimentan estos cambios en los ritmos microbianos como consecuencia de la alteración circadiana sufren desequilibrios metabólicos, intolerancia a la glucosa y aumento de peso. (17)

Los efectos negativos del sueño alterado

Hace tiempo que conocemos la relación entre el sueño, los ritmos circadianos y la salud metabólica. El sueño interrumpido y los ritmos circadianos desajustados están estrechamente relacionados con tasas más elevadas de obesidad y trastornos metabólicos, incluida la diabetes de tipo 2. Estos nuevos conocimientos sobre el microbioma y su relación con la función circadiana podrían, con el tiempo, proporcionarnos una comprensión más profunda de cómo el sueño y la actividad circadiana afectan a la salud. (18)

Qué ayuda a influir positivamente en el microbioma y el sueño

Aunque la ciencia sigue investigando las complejas interacciones entre el microbioma intestinal y el sueño, aún no se comprenden del todo las implicaciones de esta relación. Lo que es seguro es que la salud de nuestro intestino afecta a nuestro bienestar general. Al empezar a influir positivamente en el ecosistema de tu microbioma, estás tomando una medida preventiva para evitar el malestar. Sea cual sea tu rutina de sueño, hay formas de apoyar tu sueño y tu intestino.
Empieza por apoyar positivamente tu microbioma, averigua tu status quo y hazte una revisión intestinal completa para mejorar después tu bienestar general. ¡Comienza ya tu análisis personalizado del microbioma!

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Referenzen

  • Schwartz, J.R.L. and Roth, T. (2008). Neurophysiology of sleep and wakefulness: basic science and clinical implications. Current Neuropharmacology. 6:4, pp. 367-378. doi: 10.2174/157015908787386050
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  • https://www.the-scientist.com/daily-news/gut-microbes-influence-circadian-clock-35619
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  • Shu-Qun Shi, Tasneem S. Ansari, Owen P. Mcguinness, David H. Wasserman, Carl Hirschie Johnson. Circadian Disruption Leads to Insulin Resistance and Obesity. Current Biology, 21 February 2013 DOI: 10.1016/j.cub.2013.01.048
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Anni Grimm
Anni Grimm
Entusiasta de la comida y responsable de marketing
Anni no sólo es un as del marketing, sino que también está muy arraigada en los ámbitos de la nutrición y la salud intestinal, ¡y conoce todos los trucos y consejos al respecto!